Por Fabián Bosoer (para Safe Democracy)

Fabián Bosoer cree que soplan vientos de cambio en América Latina, otra vez. Para algunos, entusiasmados o preocupados, el continente profundiza su giro hacia la izquierda, buscando acentuar una ruptura con la etapa vivida en los años noventa. Para otros, –añade– se vuelve a plantear la disyuntiva clásica entre el populismo y la democracia liberal. Bosoer rechaza estas concepciones, que colocan a todos los países en el mismo saco y proclama una tercera mirada alternativa. En todo caso, la gran pregunta es: ¿existe un nuevo paradigma de la gobernabilidad democrática en América latina?


Fabián Bosoer es politólogo y periodista del diario Clarín. Es profesor de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad de Belgrano.

MICHELLE BACHELET, LA MÉDICA PEDIATRA DE 54 AÑOS, y Evo Morales, el líder cocalero de 46, la primera mujer presidente en la historia de Chile, el primer líder indígena presidente en la historia de Bolivia, son dos expresiones emblemáticas de lo que hay de nuevo en el decurso de las democracias sudamericanas. Al cabo de poco más de dos décadas del inicio de las salidas de los autoritarismos dictatoriales y en un año en el que otros siete países de esta parte del continente renuevan en las urnas sus gobiernos y legislaturas, es importante discernir que un nuevo capítulo se está escribiendo, luego de crisis, derrumbes instauraciones y consolidaciones que dieron paso a inestabilidades y caídas de gobiernos.

EXITOS Y FRACASOS
También son, Chile y Bolivia, dos ejemplos de los parecidos y diferencias, contradicciones y dilemas, que atraviesan a esta región. Bachelet y Morales muestran el contraste entre un país que llega bien plantado y orgulloso a este punto de encuentro entre el presente y el futuro y otro que viene de sufrir gruesas frustraciones y convulsiones en ese tránsito, reclama gestos de desagravio y reparación y se encamina hacia propósitos de refundación nacional de incierto destino.

Los dos son dirigentes identificados con la izquierda que, además, no reniegan de la palabra «socialismo», aun cuando le den diferentes significados y acentos. Pero mientras el ascenso de Bachelet es la consecuencia de un éxito en la evolución y consolidación del sistema político chileno y en los resultados de las precedentes gestiones de gobierno, Morales llega como reacción al fracaso del sistema político tradicional y el descalabro de sucesivos gobiernos en el país del Altiplano andino.

CENTRO IZQUIERDA
Estos parecidos y diferencias nos ilustran sobre las confluencias y divergencias regionales. Ampliamos el foco y encontramos que Brasil, Venezuela y Uruguay, además de la Argentina, tienen gobiernos definidos o autodenominados «de centroizquierda». La Argentina de Néstor Kirchner ha refrendado ese rumbo en octubre pasado. El Uruguay de Tabaré Vázquez acaba de pasar, con altas y bajas, su primer año de gestión. Lula lo tiene más complicado pero aumenta sus chances de ser reelegido en las presidenciales de octubre. Chávez marcha a tambor batiente hacia su segunda reelección en diciembre, con una «revolución bolivariana» insuflada por la renta petrolera y efecto contagioso en los países andinos.

Perú ofrecerá una prueba de ese contagio «chavista» con la irrupción del hasta ayer ignoto Ollanta Humala en la carrera presidencial que se definirá en abril. Colombia es el contrapeso de la expansiva Venezuela chavista con un Alvaro Uribe, principal aliado de Washington, firme hacia la renovación de su mandato en mayo. Y Ecuador dirá lo suyo también en octubre, luego de ver subir y caer la estrella fugaz del coronel Lucio Gutiérrez. México, entretanto, dará la nota en julio con la figura de Alfonso López Obrador picando en punta para suceder a Vicente Fox y también Nicaragua tendrá su pulseada definitoria en noviembre, con el legendario líder sandinista Daniel Ortega aspirando a un retorno electoral a la presidencia.

EL VASO MEDIO LLENO
Con esta galería de personajes diversos y atuendos variopintos, ¿qué es lo que permite hablar de una orientación común? Algunos rasgos abonan la idea de un giro a la izquierda en la región. Y también hay pistas de un hecho inédito: es la primera vez en la historia latinoamericana que gobiernos de esa filiación alcanzan éxitos económicos y pueden ejercen el poder en plenitud, sin la amenaza permanente de golpes militares, conspiraciones oligárquicas e insurrecciones armadas. Es la parte medio llena de este vaso.

Fabián Bosoer es politólogo, periodista y tiene un Master en Relaciones Internacionales de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. Es profesor de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad de Belgrano, y se desempeña como editorialista y editor del periódico argentino Clarín.