Cómo combatir el crimen en América Latina
Por qué la educación, la familia y el empleo son esenciales para la seguridad
Bernardo Kliksberg analiza el fenómeno creciente de la criminalidad en América Latina y dice que el enfoque (únicamente) policial y represivo (de mano dura) ha sido ineficiente y contraproducente hasta ahora. Es hora de renovar la lógica del debate sobre la criminalidad y propone algunas soluciones.
(Desde Nueva York) LOS LATINOAMERICANOS QUIEREN una respuesta a la inseguridad ciudadana. Y con toda razón. La tasa de criminalidad ha ascendido un 40 por ciento en la última década. El número de homicidios es de 40 cada 100.000 habitantes de población por año. Es la segunda región con más criminalidad del planeta. Buena parte de la población tiene ya la experiencia de haber sido objeto de algún delito.
Existe un acuerdo colectivo en que se debe combatir la delincuencia. Pero… ¿cómo se hace?
UNA PROBLEMÁTICA COMPLEJA
El tema es de gran complejidad. El enfoque que ha prevalecido en amplios sectores de la sociedad hasta ahora se ha orientado a exigir a las autoridades hacer más de lo mismo. Eso significa, entre otros aspectos, tratar de reforzar y ampliar el sistema policial, dar mayor discrecionalidad a la policía, penar las formas más primarias de delito, aumentar las penas, bajar la edad de imputabilidad para poder meter presos a los niños y adolescentes, y hay quienes reclaman poder encarcelar a los padres de los niños delincuentes.
Las iglesias, las organizaciones de derechos humanos, asociaciones de juristas, han reclamado que muchas de estas medidas violan la legislación internacional, los tratados mundiales firmados, y en definitiva normas éticas básicas, como el mensaje bíblico de que se deben hacer todos los esfuerzos por recuperar a los que se salen del camino.
RESPUESTAS CONTRAPRODUCENTES
Pero hay otra pregunta adicional. El enfoque puramente represivo ha demostrado ser muy ineficiente. En Centroamérica algunos líderes políticos resolvieron aplicarlo a fondo en los últimos años frente al crecimiento de las maras, peligrosos grupos de jóvenes delincuentes. Esa estrategia gana votos a corto plazo ante la legítima desesperación ciudadana, pero, ¿responde al interés colectivo?
No parece. El número de miembros de las maras sigue creciendo. Se estima en 100 mil individuos en Honduras, otros 100 mil en Guatemala, cifras aún mayores en El Salvador. En este último país se aplicó en los últimos años la mano dura, y ante sus limitados resultados la súper mano dura. Se llegó a poner fuera de la ley en varios países a los jóvenes que tuvieran tatuajes, porque las maras los utilizan. Nada de todo ello logró hacer bajar las tasas delincuenciales. Lo más probable es que quienes han creído que este era el camino más adecuando tengan que responder ante sociedades cada vez más preocupadas por el fenómeno.
LA MANO DURA QUE GENERA MÁS VIOLENCIA
Veinte prominentes organizaciones sociales de la sociedad civil han dicho recientemente: los planes de mano dura y las leyes antimaras violan normas de las constituciones, la Convención de los Derechos del Niño, y Tratados internacionales… y son ineficaces. No han reducido los índices de violencia y de criminalidad, por el contrario generan más violencia…
Brasil, con cifras graves de delito, subió progresivamente el gasto en seguridad pública y privada. En 2001 representaba el 10,3 por ciento del Producto Bruto –según estudios del BID–, el equivalente al Producto Bruto anual de Chile. Brasil gasta un Chile completo anual en represión. Sin embargo, esa estrategia no mejoró la situación del país. En México, el gasto en seguridad pública subió en 3.000 millones de dólares entre 2000 y 2004. A pesar de ello, el delito siguió creciendo.
RENOVAR LA LÓGICA DEL DEBATE
Parece haber llegado la hora de renovar la lógica del debate. Dejar de analizar este tema como una cuestión sólo policial, en donde la discusión es qué nuevo tipo de endurecimiento se adopta.
Eso no va más. No está generando buenos resultados. El único efecto práctico es que aumenta aceleradamente la población de jóvenes en las cárceles. Como son a su vez verdaderos infiernos, se convierten en una incubadora de nuevos crímenes.
Louis Wacquant señala en su agudo libro Las cárceles de la miseria que no hay correlación estadística entre aumentar el número de presos jóvenes y la reducción del delito a mediano y largo plazo. No afecta sus causas estructurales.
Pero existe otro camino. Algunas de las ciudades con mejores resultados del mundo lo están aplicando. Por un lado hay que distinguir diversos tipos de criminalidad. La sociedad tiene que defenderse vigorosamente frente al crimen organizado, los grupos de narcotráfico, las bandas del secuestro y las mafias. Todo el peso de la ley sobre ellos. Pero hay una inmensa criminalidad de jóvenes que se inician con delitos menores, o ingiriendo drogas, y después pueden ir mucho más lejos. Hay que preguntarles: ¿por qué lo hacen?
LA DESOCUPACIÓN JUVENIL
Hay extensa investigación al respecto, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), UNESCO, UNICEF, y muchas otras fuentes. Por lo menos tres grandes causas inciden.
En primer lugar, la desocupación juvenil. Excede el 20 por ciento en todas las grandes ciudades de América Latina. Hay un ejército gigantesco de millones de jóvenes que han debido desertar del sistema educativo, por pobreza, y están fuera del mercado de trabajo.
El 25 por ciento de los jóvenes latinoamericanos está en esa situación. Están fuera de todo, desesperados, son vulnerables y carne de cañón para el crimen organizado.
LA DESARTICULACIÓN DE LA FAMILIA
En segundo lugar, la desarticulación de la familia. Los estudios son concluyentes. Si la familia funciona bien y entrega los códigos éticos, es ejemplo de conducta cotidiana, y tutorea a los jóvenes desde el amor, previniendo la criminalidad. Nadie más puede hacerlo así. En efecto, en diversos países (como Estados Unidos y Uruguay) los estudios muestran que dos tercios de los delincuentes jóvenes vienen de familias desarticuladas.
La tercera causa es la baja educación. Sobre 40.000 presos en las cárceles argentinas, sólo el 5 por ciento había terminado la secundaria o la Universidad (según cifras del Ministerio de Educación argentino de 2004).
Es necesario enfrentar el crimen organizado. Pero al mismo tiempo, hay que romper con el enfoque únicamente policial de un asunto muy grave.
ESTADOS UNIDOS SIGUE OTRO CAMINO
Mientras que muchos en América Latina intentan convencer a la opinión pública de la necesidad de una mano más dura –e invocan a supuestas experiencias estadounidenses– lo cierto es que en Estados Unidos se están dando fuertes tendencias inversas. El aumento de la población carcelaria y de las sentencias ha llevado a una inflación fenomenal del gasto en prisiones y juzgados (un 154 por ciento en los últimos 20 años).
En 2001, los distintos Estados del país gastaban tanto en ese rubro como todo lo que gastaba en salud pública y hospitales. Según indica el New York Times, ante los escasos resultados de este enfoque y asustados por la tendencia de la sangría, más de la mitad de los Estados han tomado medidas legislativas para modificar las leyes duras que aprobaron en los noventa. En el campo de la drogadicción hay en Estados Unidos una presión creciente por suplantar prisión por tratamientos.
CAUSAS PROFUNDAS
El 73 por ciento de los ciudadanos de Maryland, por ejemplo, uno de los estados que cambió su legislación en tal sentido, consideran que el tratamiento es un camino mejor que la prisión para parar el uso de la droga. Se estima que cada dólar gastado en rehabilitación de drogadictos genera 8 dólares de beneficios, por su incidencia en el descenso de la criminalidad y el aumento de la productividad.
Para reducir la criminalidad en América Latina hay que actuar sobre las causas profundas. Es necesario crear empleo para jóvenes a gran escala. Una gran alianza entre política pública y empresa privada al respecto puede aportar mucho. Al mismo tiempo, hay que proteger la familia, en serio, con medidas de fondo.
INVERTIR EN EDUCACIÓN
Por otra parte, la opinión pública debe respaldar vigorosamente el aumento de la inversión en educación. La decisión de llevarla al 6 por ciento del Producto Bruto para 2010 es una de las mejores inversiones que puede hacer una sociedad para enfrentar de verdad el problema de la delincuencia.
UNICEF concluye sobre las maras centroamericanas que el tema no puede ser visto sólo como un problema de seguridad.
En la misma dirección, el presidente argentino Néstor Kirchner ha advertido estos días –en un país alarmado por el problema de la inseguridad– que la seguridad no se construye con un palo en la mano.
CAMBIAR EL DISCO DURO
La seguridad es un camino a construir colectivamente en una región que ha visto crecer a niveles inéditos el desempleo y la exclusión social en los años noventa, y generó tasas de desempleo y pobreza juvenil récord (en diciembre de 2002, el 75 por ciento de los jóvenes argentinos menores de 18 años eran pobres).
Por esta razón, hay que mejorar los instrumentos de lucha contra el crimen organizado, como la policía y la justicia. Pero según la encuesta Latinobarometro, dos tercios de los latinoamericanos desconfían de la policía y en muchos casos la ven como parte del problema.
No podrá haber más dilaciones, ni vueltas: hay que abrir oportunidades a los jóvenes, fortalecer la familia –que es la mayor unidad preventora del delito con la que cuenta la sociedad– y brindar educación a todos.
Para empezar, hay que cambiar el disco duro mental sobre la criminalidad, y mejorar la calidad del debate.
Publicado por:
Carlos gabriel Bolbarán bolbarán
fecha: 13 | 10 | 2006
hora: 12:41 am
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La verdad es que no existe una voluntad real de terminar con la pobreza y la falta de oportunidades, ya que no hay ESA INSTANCIA para que las personas que desean aportar con Creatividad y buenos proyectos, tengan acceso. Deseo ayudar a la Concreción de esos Sueños de Igualdad y Soldaridad de Muchos postergados que por no tener los Medios suficientes son ignorados, perdiendo para siempre UN GRAN APORTE DE INNOVACION SIN DISCRIMINAR, que este Mundo le urge poner en práctica. En concreto Preocupemonos más del FONDO QUE DE LA FORMA DE ATACAR EL PROBLEMA.
Carlos Gabriel Bolbarán Bolbarán
procreactivo@yahoo.es
CHILENO
Fonomovil : 56 9 90819002
Publicado por:
Pablo Veire
fecha: 13 | 10 | 2006
hora: 7:55 pm
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Los discursos presuntamente eticos y moralizadores de los funcionarios de los organismos internacionales como el BID, el PNU, etc no aportan otra cosa mas demagogia. Ademas encubren las prcaticas irregualares de esos organismos.
Entiendo que Kliksberg esta limitado por sus funciones en el BID, como lo estan tambien los funcionarios de ONU, etc. etc., pero la etica es mas que una palabrita linda. Es la expresion de un compromiso que necesita sobre todo de corage y los burocratas para ser exitosos
necesitan ser obsecuentes.
Hay que hablar menos de etica y hacer mas, como lo hizo Yunus. Construyo el banco de los pobres a pesra que el Banco Mundial le negi su apoyo. Asi ,lo dice YUnus
Publicado por:
Cesar Benavides Cavero
fecha: 08 | 03 | 2007
hora: 5:34 am
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Hace mas de veinte años el Banco Mundial, la ONU y toas las grandes organizaciones ofrecieron reducir la pobreza, sin embargo esta ha crecido a pesar «dizque esta organizaciones ayudan a los paìses en vìas de sarrrollo. Preguntamos: ¿Què està pasando con los paìses llamados ricos? ¿Acaso no les interesa el aumento de la crmininalidad en mas del 40%?. Tampoco interesa la pobre educaciòn de los paìses tercer u cuarto mundistas, ¿por què han convertido a la educaciòn en UN NEGOCIO MERCANTILISTA?.
Acaso lo mencionado anteriormemter no constituye el «caldo de cultivo» del terrorismo. ¿Por que se defiende tamto los DD. HH de los terroristas y no de los ciudadanos que son vìctimas de estos galifardos?
Con tantos estudios y dià gnosticos no han podido dar una mejor receta para desarrollar las naciones pobres, sin pensar en ideologìas polìticas.
Publicado por:
ANA
fecha: 12 | 03 | 2007
hora: 5:39 pm
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La criminalidad y la rapiña no son consecuencias de la pobreza sino de la rentabilidad de ciertos negocios de bajo fondo evidentemente apoyados por ciertas manos poderosas.
En Argentina por lo menos lo que falta es entuciasmo por parte del gobierno en industrializar con seriedad el país en aspectos modernos como podrìan ser empresas transformadoras de la materia prima:biocombustibles ,alimentos,etc.En Europa(Suecia) con territorios mucho menores y menos productivos los omnibus funcionan con un combustible que sacan de la vid.Acá ya están los pseudo intelectuales opinando en contra de los biocombustibles(de conformidad al pacto BUSH CHAVES).
Tampoco se habla de empresas que se especialicen en la purificación de aguas contaminadas.y/o solución de otros problemas ecològicos.
Lo único que hacemos es recordar el pasado para amargarnos y de esa forma no hay proyectos importantes que levanten el país y compitan con la empresa ilegal del robo,crimen,narcotráfico,etc etc.
Si bien el país luego del default parece condenado por las inversiones en serio,los propios productores podrìan invertir en generar la industria transformadora.Pero a eso se están oponiendo los pseudo intelectuales.
Lostrenes ,por ejemplo ,en un paìs tan extendido han sido condenados por pseudo intelectuales de izquierda y derecha en alianza con la entrega del país.
De la industria ferroviaria nadie habla ,Argentina tenìa talleres importante de fabricaciòn y acondicionamiento de vagones.que con la globalización se fueron al abandono.
Argentina tenìa una buenísima industria textil ,accesible la buena ropa hasta para las clases humildes.
Ahora con la globalización andamos con ropa cara ,importada de malísima calidad ,outlet ,segunda mano etc.Teniendo en cuenta que hay estúpidos que creen que vestir segunda mano de paises desarrollados o desechos de fabricación es distinguido.
En realidad el país habìa perfeccionado su industria y fabricaba con calidad pero de eso no quedò nada.
En realidad con la famosa globalización al país lo hicieron polvo y analfabetizaron polìticamente hasta a los universitarios.
Ahora parece que los representantes de el pseudo populismo están de acuero con los pseudo intelectuales entreguistas.
El enviado directo de BUSH :O SEA CHAVEZ LO PRIMERO QUE DIJO(EN TOTAL ARMONIA CON LOS QUE HAN PLANEADO QUE ESTE PAIS NO SE INDUSTRIALICE)QUE LA FABRICACION DE LOS COMBUSTIBLES VEGETALES IBAN A HACER ENCARECER LOS ALIMENTOS.
Publicado por:
Cesar Benavides Cavero
fecha: 21 | 04 | 2007
hora: 4:47 pm
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BASTA DE TANTO CRIMEN:
Nuevamente en USA se ha teñido de sangre los claustros de estudios superiores y las autoridades que son las grandes responsable, debido a la politiquería que aplican en sus comunidades. Ergo, no se debe LLORAR SOBRE LA LECHE DERRAMADA.
En nuestro Perú existe un dicho de nuestras abuelos: SARNA CON GUSTO NO PICA.
BASTA DE TANTA VIOLENCIA CRMINAL
Dr. Cesar Benavides Cavero
Instituto Peruano de Criminalística y Pericias.
Publicado por:
rweoaa
fecha: 09 | 06 | 2010
hora: 7:08 am
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