Cómo restringir el poder de Estados Unidos en la región
Luciano Anzelini analiza la proyección del poder estadounidense en América del Sur desde la perspectiva teórica de las Relaciones Internacionales y reflexiona sobre la unipolaridad estratégico-militar que domina la región desde los años de la Guerra Fría. Anzelini toma como referencia a prestigiosos académicos de la Universidad de Harvard, como Robert Cooper y Stephen M. Walt, y estudia las alternativas que tienen los gobiernos sudamericanos para restringir el poder de Washington en el territorio. En este contexto, la estrategia de soft balancing se revela como el mejor recurso al que pueden apelar los mandatarios de la zona para obtener resultados satisfactorios en su relación con Washington, y que detalla a continuación
Luciano Anzelini es politólogo y docente de la Universidad de Buenos Aires e investigador de la Universidad de Quilmes. Es becario de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (Argentina) con sede en la Universidad Torcuato Di Tella.
EN SU LIBRO THE BREAKING OF NATIONS: Order and Chaos in the Twenty-first Century (London, 2003)r habla de un mundo parcelado.
Premodernidad, modernidad y posmodernidad son las etiquetas que utiliza este diplomático y académico británico para hacer referencia a las diferentes regiones del planeta.
Cada una de ellas, a su vez, cuenta con un principio ordenador distintivo:
1) La hobbesiana –guerra de todos contra todos– domina la premodernidad.
2) El balance de poder hace lo propio en la modernidad.
3) El altruismo y la confianza mutua rigen el mundo posmoderno.
En este marco, los continentes africano, asiático y europeo resultarían, respectivamente, retratos de cada uno de los mundos que identifica el autor.
DIFÍCIL CLASIFICACIÓN
Las preguntas que surgen desde una perspectiva sudamericana frente a los criterios desplegados por Cooper son las siguientes:
a) ¿Cuál de estos mundos grafica de modo más preciso la actual situación de Sudamérica?
b) ¿Cuál de los mencionados principios ordenadores se aplica mejor a la región?
La respuesta al primero de los interrogantes es que América del Sur indudablemente forma parte de la modernidad. Sin embargo, lo que resulta más problemático es identificar, entre los principios ordenadores señalados por Cooper, uno que se aplique a la geografía del Cono Sur latinoamericano.
A diferencia de la guerra civil expandida en zonas de la premodernidad (África o Asia Central), del imperio de la ley dominante en el mundo posmoderno (la Unión Europea) o del balance de poder y la disuasión que distinguen a otras regiones del mundo moderno (Oriente Medio o Sudeste asiático), en Sudamérica ninguno de estos criterios resulta fácilmente aplicable.
MARCADA JERARQUÍA
Contrariamente a lo que ocurre en el resto del mundo moderno o westfaliano, el orden sudamericano no es el resultado de la práctica del balancing sino más bien la consecuencia directa de la presencia de Estados Unidos como hegemón regional.
Así pues, es la jerarquía y no el equilibrio de poder el principio ordenador en esta parte del planeta. Esta realidad no obsta para que ciertos criterios posmodernos se hayan ido expandiendo en las relaciones que mantienen los países sudamericanos entre sí. De este modo, hoy resulta plausible hablar de América del Sur como una zona de paz interestatal que aspira a convertirse, como lo ha logrado Europa, en una comunidad pluralista de seguridad.
Simplificando al máximo, se podría decir que América del Sur es una región hegemonizada por Estados Unidos, en la que, a partir de la disolución de viejas hipótesis de conflicto, se han generalizado ciertas dosis de altruismo o confianza mutua entre sus Estados. En este contexto, la pregunta que cabe formularse es si los países sudamericanos serán capaces en el futuro de restringir la extensión del poderío estadounidense en la región.
EL DESPERTAR DEL SUR
Tras el colapso del bloque soviético en 1991 y el surgimiento de una nueva estructura de poder, la discrecionalidad de Estados Unidos en la gestión de los asuntos mundiales se ha acentuado notoriamente. Ello resulta evidente en varias regiones del planeta, pero de modo particular en las relaciones interamericanas, en donde la unipolaridad estratégico-militar no es un fenómeno de la posguerra fría sino un rasgo estructural de larga data.
Esta situación no ha impedido, que las potencias menores se las hayan ingeniado en los últimos años para desplegar estrategias restrictivas de poder. Como lo ha afirmado Stephen M. Walt en su brillante libro Taming American Power: The Global Response to US Primacy (W.W. Norton & Company, New York, 2005):
Cuando las potencias extranjeras tienen objetivos que son incompatibles con la política exterior de Estados Unidos, deben desarrollar estrategias de oposición que sean viables. Algunos países intentan balancear el poderío estadounidense aliándose contra él (…) otros tratan de comprometer el poder estadounidense dentro de las instituciones internacionales. Algunos recurren al chantaje, intentando lograr concesiones de Washington por medio de amenazas (…) Otros simplemente ignoran o rechazan las demandas de Estados Unidos. Y algunos países tratan de socavar el poderío estadounidense atacando su legitimidad, una estrategia notablemente facilitada por las recientes intervenciones internacionales de Washington.
¿EL FIN DEL IMPERIO?
De la gama de opciones presentadas por Walt, los países de América del Sur deberían aplicar la estrategia de soft balancing (la segunda de las enumeradas por el autor). Dicha alternativa consiste principalmente en restringir el empleo abusivo del poder por parte de Estados Unidos a través de un uso diligente de las instituciones y los regímenes internacionales.
Si bien resulta claro que Estados Unidos no someterá sus intereses de seguridad a los dictámenes de dicho entramado institucional –así ha quedado flagrantemente demostrado por la experiencia bélica de Irak–, las posibilidades se hallan bastante más expandidas en lo referente a los campos político y económico-comercial.
La pérdida de legitimidad internacional de Estados Unidos ya es demasiado ostensible como para que extienda su arrogancia imperial a campos no ligados con lo estrictamente militar. Así pues, la opción de contener al gigante en determinados asuntos no debería ser vista como una quimera por las potencias de segundo o tercer orden.
LA UNIÓN HACE LA FUERZA
En este contexto, los países de la región han demostrado, ocasionalmente, capacidad para actuar de modo concertado en cuestiones estratégicas frente a Estados Unidos. A modo de ejemplo cabe citar –si bien el caso mexicano excede el marco estrictamente sudamericano– la oposición presentada por los gobiernos de Vicente Fox y Ricardo Lagos a la guerra de Irak en el Consejo de Seguridad en 2003.
Ahora bien, la estrategia de soft balancing no implica la adopción de una oposición irrestricta frente a cualquier propuesta estadounidense, sino más bien el despliegue de un recurso realista que combine restricción con colaboración dependiendo del asunto de la agenda que esté en cuestión.
Para lograr una aplicación exitosa, los gobiernos de la región deberán comprender que el funcionamiento de la estrategia de soft balancing dependerá, ante todo, del reconocimiento de valores compartidos con Washington. En este marco, la opción de la diplomacia intervensionista de Hugo Chávez se presenta justamente como la contracara de las necesidades actuales de la región.
En resumidas cuentas, en caso de primar el confrontacionismo estéril de dudosas credenciales democráticas, Sudamérica se encontrará con mayores limitaciones aún en su objetivo de restringir al actor imperial.
Publicado por:
Ana
fecha: 03 | 04 | 2007
hora: 11:18 pm
Link permanente
Observo contradicciones de uno a otro extremo entre el artìculo sobre los 25 años de Malvinas y este otro.
Pobre latinoamérica ,siempre ha tenido influencias contradictorias de Europa ,Estados Unidos y siempre las sigue teniendo.pueden estar camufladas pero son de igual peso.
Da un poco de tristeza la situaciòn de México pués,con toda habilidad norteamérica la unió a su crisis econòmica,en el momento oportuno y ahora la humilla.
A Brasil siempre,a pesar del TRABHALLISTA,lo tiene de interlocutor válido.Es colonización portuguesa ,entre esclavistas se entienden.
A Chile Inglaterra la usa como otrora lo hizo con nosotros .
Con el resto de los paises no me pongo a opinar pués tendrìa que conocerlos más profundamente.
Lo que se nota es que hay elites polìticas,ejemplo la Venezolana y la argentina que evidentemente han sido jakeadas convenientemente.
De todos los nuevos aliados la Sra Bachellet me parece que no lo es tanto ,es muy capaz esa señora ,muy chilena como lo son todos los chilenos pero la veo un poquitìn más jakeada que al anterior presidente.
Hubo hace unos meses una presión contra el gobierno nuestro que me pareciò bastante inconciente ,pués aparte de ser presiòn hubiese significado peligro para una comunidad muy golpeada.
Ahora bien,como tenemos tantas presiones nos enteramos de los porqué del atentado del 11 de setiembre antes de ese nefasto dìa ,como se iba a girar la opinión pública estadounidense(tal como ocurre ahora-léase el escrito de Escudé-) etc etc
Todo ello gracias a los trabajos para liquidar el gobierno de la alianza.
Publicado por:
Ana
fecha: 05 | 04 | 2007
hora: 8:26 pm
Link permanente
Me parece que con las experiencias previas que hemos tenido los latinoamericanos pasamos de la premodernidad a la hiperpost modernidad.
Lo que pasa es que nuestros defectos y virtudes se propalan comodamente y los de europa se callan convenientemente.
Nuestro próximo peligro tembién lo va a tener Europa
así que mejor antes de separar el mundo en zonas de evolución se dediquen los Europeos a armar su ejército propio.
En américa latina ni esa ventaja vamos a tener pués el reclutante serìa Chavez que es empleado de norteamèrica.Bueno Uds también incorporarán a Turquia ,que en estos menesteres ni ATATURK los va a ayudar.
Cuidado con el TIO de Europa.que ni siquiera la TIA ABUELA INGLATERRA esta vez lo va a poder civilizar.
Siguiendo la linea de Macondo le creemos a TONY QUE NO HIZO NINGUNA CONCESION .Le va a pasar lo de PINOCHO.
Publicado por:
Pedro
fecha: 13 | 04 | 2007
hora: 4:58 am
Link permanente
Ana, no tengo idea quien sos, que haces de tu vida, a que te dedicas o que estudiaste; pero te cuento que para hablar de las relaciones internacionales hace falta mas que veer Intrusos a la tarde o Gran Hermano a la noche.
Publicado por:
ANA
fecha: 13 | 04 | 2007
hora: 6:33 am
Link permanente
Mira Pedro gran hermano viene de Holanda ,país que tiene la más selecta dinastìa :la de Orange .Influencia del Mercado comùn.
Desconozco de donde viene intrusos ,que es recomendada por catedráticos de la UBA pero supongo que ha de ser de la BBC o de las cadenas norteamericanas.Te acuerdas de ELSA MAXWEL,esa la debes conocer porque perteneciò a tu tiempo era una chismosa de espectáculos así que hasta en eso nos influencian de afuera.Que vamos a hacer .No sabes el grado de distinciòn internacional y globalizada que tienen estos programas selectos.!Cuidadito que son internacionales y representan la más pura estètica de estos tiempos.
Publicado por:
Pedro
fecha: 13 | 04 | 2007
hora: 6:03 pm
Link permanente
Ana, justamente esto es lo que yo digo; estamos mezclando tomates con bifes de chorizo. El tema es que hasta que los argentinos no reconozcamos que no somos europeos, sino que somos Sudamericanos, latinos, como los peruanos, bolivianos, chilenos y paraguayos, vamos a seguir en este limbo, donde culpamos de todos nuestros sufrimientos a los Estados Unidos, a los chilenos o a una cospiracion internacional manejada por los britanicos. Por favor, los mas grandes responsables de todo lo que nos pasa somos nosotros, y nadie mas. Es por eso que es necesario hacer las cosas por que son buenas para el pais y para la getne y no por que quedan muy bien como slogan publicitario y demagogico.
Publicado por:
Roberto
fecha: 13 | 04 | 2007
hora: 6:22 pm
Link permanente
Creo que lo esxpuesto por Anzelini es un analisis muy inteligente de la situacion mundial a nivel teorico internacionalista. Dividir al mundo en tres categorias, similares pero de manera original, a los estilos Cooper y Wendt resulta brillante y conveniente. Sin duda alguna Europa ya se encuentra en un mundo de la sociedad civil global, mientras que nosostros (Latinoamerica) estamos en el mundo moderno, pero con grave riesgo de fracturas en el continente que provoquen el retorno de ciertas regiones a un mundo premoderno. No me refiero solamente a Colombia, Bolivia o Ecuador. Sino tambien, a la ciudad de Rio de Janeiro y a los alrededores de Buenos Aires y Sao Paolo. Es por eso, como bien dice Anzelini, se acerca la hora de la invevitable eleccion por parte de nosotros, Como los EEUU todavia tienen su porcion de influencia en la region, debemos aceptarla como un fait accompli, pero al mismo tiempo debemos hacer las paces, reconciliarnos, y pedirnos perdon mutuamente. Sobre todo debemos perdirnos perdon a nosotros mismos por todo lo que hemos sufrido durnate la guerra fria. Enfretarnos al imperio solo puede conducir al aislamiento y a la guerra. En cambio, una pacifica y cordial convivencia podria brindarnos la paz necesaria para crecer, sin esto querer decir que siempre vamos a apoyar a los EEUU, como bien lo demostraron Chile y Mexioc en el 2003 respecto a Irak en la ONU.
Publicado por:
ANA
fecha: 14 | 04 | 2007
hora: 12:41 am
Link permanente
Don Pedro que al querer ofenderme ha ofendido màs profundamente a Rial uno de los pròceres de nuestra emancipaciòn del 20 de diciembre de 2001 junto con el intelectualìsimo TINELLI.Uno de los pioneros de la participaciòn popular.
Mi interés fundamental es entrar en estos blog en lenguaje,prefiero que sea el de CATITA,para hacer ver a todos estos jòvenes que ya el problema de AMERICA LATINA en realidad pasò.
Ahora el problema es de la civilizaciòn occidental que me parece que està en el TITANIC.
Me gustan algunos escritos y los reto para que se den cuenta de ciertas cosas que les van a hacer bien.
Hay otros,como los de Escudé ,que me parece que están girando para un lado no democrà tico,Dios quiera no sea asì.
Ahora,ya francamente lo que pasa con la democracia en argentina me tiene un poquito sin cuidado.Periodistas y críticos del gobierno en general que sufren alguna presiòn la tienen bien merecida
Me parece que aAMERICA LATINA HAY QUE DEJARLA QUE SE CAIGA Y LEVANTE SOLA SIN TANTAS RECETAS.
Ahora los problemas se van a presentar en otros puntos del globo.y van a ser más graves que los nuestros.Reitero todo lo dicho
Publicado por:
Pedro
fecha: 14 | 04 | 2007
hora: 3:40 am
Link permanente
Ana, vos sos ana u otra persona que escribe en esta pagina, vos no seras Escude haciendose pasar por una comentarista? por que lo de Rial como procer de nuestra emancipacion es la clase de disparatada que se mandaria Escude para provocar reacciones. Igual yo no te quiero ofender.
Publicado por:
ANA
fecha: 14 | 04 | 2007
hora: 11:09 pm
Link permanente
NOOOOOOO,ESCUDE NO PREFIERO SER EL RABINO O EL HARIKRISHNA