bancocentralbrasil.jpgLa subida de los tipos de interés ha beneficiado a la economía brasileña en los últimos años. Ahora, ante el aumento de los precios de las materias primas, el Banco Central podría repetir la estrategia, hecho que el autor desaconseja. La clave, afirma, reside en aumentar la oferta mundial de los alimentos y materias primas, incorporando nuevas tecnologías y patrones de producción pues es la demanda de los nuevos mercados, como China, los causantes del encarecimiento de los precios.

(Desde San Pablo) EN LOS ÚLTIMOS AÑOS, el gobierno brasileño ha mantenido una política monetaria restrictiva, ostentando una de las más altas tasas de interés reales del mundo, expresando así como su principal objetivo económico el control de la inflación.

«Los tipos de interés son responsables del ingreso de capitales, revalorizando la moneda local en más de 40 por ciento” El Banco Central sube o baja los tipos de interés en función de las expectativas de la evolución de los precios, compatibles con una meta previamente definida de inflación anual, que para 2008 se sitúa en el 4,5 por ciento.

Esta política ha demostrado ser eficiente en el logro de su objetivo. Altas tasas de interés han permitido mantener el ritmo de crecimiento de la demanda agregada a una tasa menor que la oferta, inhibiendo cualquier posibilidad de inflación de demanda.

LA INFLACIÓN, BAJO CONTROL

“El costo que Brasil pagó por este exitoso programa de estabilización fue una tasa de crecimiento del PIB menor al crecimiento de otros países emergentes” Los mencionados tipos de interés son responsables también del ingreso de capitales, aprovechando la rentabilidad de la diferencia de tasas de interés domesticas y externas, permitiendo así la valorización de la moneda local contra el dólar en más de 40 por ciento en los últimos cuatro años.

Considerando que, para una economía emergente, el tipo de cambio, en este caso el dólar norteamericano, es uno de los mas importantes referentes en la formación de las expectativas de precios, la moneda local valorizada ha contribuido significativamente a mantener la inflación bajo control.

El coste que Brasil pagó por este exitoso programa de estabilización fue una tasa de crecimiento del Producto Interior Bruto menor al crecimiento de otros países emergentes, alrededor del 20 por ciento en los últimos 5 años, una tasa inferior a la de países como China, India y Rusia, y aún menor que la de algunos vecinos sudamericanos como Argentina y Venezuela.

MAYOR OFERTA QUE DEMANDA

“La producción aumenta por encima del consumo, la oferta crece más que la demanda. No hay indicios de recalentamiento de la economía” El Banco Central brasileño ha enviado señales en las últimas semanas que podría aumentar aún más las altas tasas de interés vigentes. La explicación está fundamentada en el aumento de los precios de los alimentos, de algunas mercancías como el petróleo y de un recalentamiento de la demanda agregada.

Con respecto a este último punto, es importante resaltar que las inversiones en máquinas y herramientas han aumentado el año pasado un 13,4 por ciento, un valor que duplica el crecimiento del consumo, que acumuló un 6,7 por ciento.

“Los precios han aumentado por el aumento mundial del consumo” Este dato demuestra que la capacidad productiva aumenta por encima del consumo, o sea que la oferta crece más que la demanda. Además, si consideramos el factor trabajo, los números muestran que los salarios han crecido 3,1 por ciento durante el último año, un valor menor al aumento de la productividad, en el orden del 4 por ciento. En principio, no hay indicios evidentes de recalentamiento de la economía.

AUMENTA EL CONSUMO MUNDIAL, AUMENTAN LOS PRECIOS

“A menos que las tasas de interés de Brasil enfríen la economía china, nada probable, no hay razón para aumentarlas” Con relación al aumento de los precios de los alimentos y materias primas, es necesario enfatizar la causalidad de los mismos con el fin de disponer de un diagnóstico que induzca a los hacedores de política económica a tomar las medidas adecuadas y correctas.

Los mencionados precios han sufrido incrementos debido al aumento mundial del consumo, básicamente de países como China e India, que han incorporado al consumo a vastas franjas de la población.

“Hasta el FMI ha sugerido un leve aumento del gasto público para aumentar la demanda”A menos que las tasas de interés brasileñas puedan enfriar la economía china, cuestión que hasta el momento no parece probable, no existen razones validas para aumentar las tasas de interés en Brasil.

La solución a los problemas de demanda de alimentos y materias primas está en incrementar la oferta mundial de los mismos, incorporando nuevas tecnologías y patrones de producción.

¿DIRECCIÓN OPUESTA?

Una subida de los tipos de interés actualmente parece ser una medida económica de dudosa utilidad, donde los riesgos de generar efectos negativos, como una caída en la tasa de crecimiento, son mayores que los beneficios probables.

Todo parece indicar que el mundo camina hacia una recesión. Estados Unidos se prepara anunciando sucesivas bajas en los tipos de interés. Hasta el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) ha sugerido un prudente aumento del gasto público, en los países que puedan hacerlo, a los fines de aumentar la demanda.

En este contexto, Brasil parece asumir una dirección opuesta anunciando una probable suba de los tipos de interés. Es bueno saber que cuando la música ha cambiado, el paso de baile debe ser otro.