estadobienestar.jpgArgentinitis aguda: incapacidad de crecer combinada con aumento de la inequidad social. ¿Muestra España, inadaptada a la globalización política y económica, síntomas de esta enfermedad?

(Desde Madrid) ESPAÑA ES UN PAÍS cuyo producto per cápita en términos de poder adquisitivo de la población oscila en torno a los 31 mil dólares por año. Argentina, alcanza los 14.000. Pero la enorme diferencia es que el 10 por ciento más rico de los españoles es 10 veces más rico que el 10 por ciento más pobre y en cambio el 10 por ciento más rico de los argentinos es 40 veces más rico que el 10 por ciento más pobre.

El resultado es que Argentina tiene un 10 por ciento más rico que es más rico en promedio que el 10 por ciento más rico español, pero tiene un 10 por ciento más pobre que es increíblemente más pobre en España. «La Argentina de los años 60 se parecía más a la España de hoy que a la Argentina de hoy, es tan injusta» Estas diferencias se repiten cuando uno compara España con cualquier país latinoaméricano.

España cuida de sus menos privilegiados, Argentina, y América Latina en general, los desprecia. Pero aunque en América Latina, en general, éste ha sido siempre el caso, en Argentina era diferente.

La Argentina de cuando yo nací, en los años 60, era un país mucho más justo que ahora, era el país que se diferenciaba en América Latina, por un simple motivo: la enorme clase media que existía, similar en proporción a la que hay en España hoy.

CÓMO VIVEN LOS POBRES

El resultado es que la Argentina de los años 60 se parecía más a la España de hoy que a la Argentina de hoy, que es tan injusta.

En este gráfico se ve la evolución de la pobreza en el gran Buenos Aires y cómo explota en los años 70, baja en la primera época menemista y luego sube muchísimo en la segunda etapa menemista, con De La Rúa y la primera etapa Kirchner, hasta llegar a más del 50 por ciento. Ahora sigue muy alta, en un 30 por ciento.

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Volviendo a España el objetivo de este artículo es que, en escala menor, este país, empantanado en un sistema político y económico incapaz de adaptarse a la globalización, empiece a sufrir de argentinitis aguda. Argentinitis aguda consiste en la incapacidad de crecer combinada con un enorme aumento de la desigualdad que produce un país dividido con una marginalidad social y económica inaceptable. El problema más grande que tiene Argentina es que un tercio de los argentinos vive en pésimas condiciones. Una sociedad debe ser juzgada por cómo viven sus pobres, no por cómo viven sus ricos, que en Argentina, como bien saben los españoles que han visitado mi país natal, viven mejor que aquí, con más servicio, viviendas más grandes y todo tipo de comodidades. Los pobres argentinos están tan mal porque tras 35 años de pésimas políticas económicas ese tercio de la población se cayó del tejido social y hoy en día viven en chabolas (villas miserias) o viviendas precarias y sin posibilidad de recibir un mínimo ingreso para sobrevivir mes a mes.

¿ESTÁ EN PELIGRO EL ESTADO DE BIENESTAR?

El español, y el europeo en general, es mucho más solidario que el argentino. Entre las clases altas argentinas el Estado de bienestar tan común en Europa es frecuentemente detestado. Yo he escuchado decir en Buenos Aires que las pequeñas ayudas que existe en Argentina, similares a lo que es en España cobrar el paro (seguro de desempleo) son inmorales porque le pagan a la gente por no trabajar. «Argentina en cuarenta años de fracaso económico terminó con una clase social marginada muy amplia» Aunque es verdad que en Europa alguna gente abusa del seguro de desempleo, la gran mayoría no lo hace, y si no fuera por cobrar el mismo estaría en la miseria que se encuentran muchos argentinos.

El peligro estriba a mi juicio en que, dependiendo de la gravedad y duración de la crisis económica española, el Tesoro español no pueda mantener el Estado de bienestar tal como lo conocemos, que la falta de creatividad de la clase empresarial española no genere suficiente empleo y se produzca una marginalidad al estilo argentino. Hace falta un cambio de mentalidad del español medio para que deje de pensar que el Gobierno es el que tiene que arreglar todo.

Antes de seguir debo decir que considero esto una posibilidad lo suficientemente alta como para que valga la pena hablar de ella, pero no lo suficientemente alta para creer que es un escenario probable. Esperemos que esto no ocurra y que la crisis no sea ni tan aguda ni tan larga como la de Argentina.

Pero aunque sea poco probable que lo sea, porque España tiene más recursos, grandes empresas, un tejido industrial y de servicios mucho más desarrollado que Argentina y una población en promedio mejor educada, creo que merece la pena estudiar de cómo Argentina en cuarenta años de fracaso económico terminó con una clase social marginada muy amplia, con toda la inestabilidad que, en consecuencia, ello le trajo al país.

ESPAÑA: GOBIERNO, GOBIERNO, GOBIERNO

¿Qué se puede hacer para que en España no ocurra lo mismo? Creo que el tema más se merece un libro que un artículo, así que me voy a limitar a dar una lista e invito a los lectores a que se unan a la misma. «En España pareciera que para lograr mantener su unidad termina construyendo una tela de araña burocrática en la que todos creen mandar» Por mi parte creo que España debe diversificar su ingreso de las fuentes tradicionales de riqueza, la construcción y el turismo, y vivir como viven otros países de Europa, es decir, más de la creación intelectual. También opino que hace falta un cambio de mentalidad del español medio para que deje de pensar que el Gobierno es el que tiene que arreglar todo y contribuir a título personal para que su país mejore.

Luego está el tema de la desintegración cultural de España, que ha llevado a que el país tenga una increíble cantidad de capas burocráticas de gente cuyas actividades no son nada productivas. España es un país sobre gobernado y sobre regulado. Un habitante de Barcelona, digamos, está gobernado por la Unión Europea, por el Gobierno de España, por el Gobierno de Cataluña, por el Ayuntamiento de Barcelona, cada uno con sus congresistas, poder ejecutivo, judicial. Uno de Madrid igual, ya que al agregarse capas de burocracia por el tema de los nacionalismos inclusive las partes de España que indudablemente quieren ser España heredaron el mismo sistema.

Gobierno, gobierno y más gobierno. En España pareciera que para lograr mantener su unidad termina construyendo una tela de araña burocrática en la que todos creen mandar. El resultado es una clase social enorme de funcionarios que frecuentemente frenan a la economía. Por el resto España no es culpable por sí sola de su crisis, que como sabemos es global; pero la ferocidad y rapidez con que la crisis global ha golpeado a España es lamentablemente muy española.

UNA SITUACIÓN PEOR

España tiene hoy en día una situación peor a la que la mayoría de los países industrializados: teme llegar con el porcentaje de paro más grande de las economías importantes del planeta. Así que España ya ha comenzado a sufrir un caso de argentinitis aguda. Esperemos que se cure de la misma antes de que quede una generación marginada de gente incapaz de encontrar una buena salida laboral como ocurrió en las últimas décadas en Argentina.

Mientras tanto yo nunca pierdo la esperanza que Argentina vuelva a ser el país próspero y equitativo que era cuando yo nací, donde la criminalidad casi no existía y casi todos los argentinos vivían bastante bien. Por eso sigo apoyando a proyectos como Educ.ar, que fundé en Argentina en 2000. Sigo pensando que el futuro de cada país sí depende de una variable a destacar: la educación.