Con una conducta ética por parte de las empresas y corporaciones ganan todos: ellas mismas y la sociedad en su conjunto. Conozca cuáles son los países más avanzados en la materia, cómo las empresas de punta se disputan el liderazgo y sepa a continuación por qué –frente a la creciente presión social de inversores y consumidores– la Responsabilidad Social Empresarial ha ganado la batalla de las ideas en el mundo global de hoy y es mucho más que una moda pasajera.
Más ética (empresarial), más desarrollo
Mucho más que una moda
Sagrario Morán señala que tres fases deben darse –de menor a mayor complicación y extensión en el tiempo– para alcanzar el final definitivo de ETA en España: la primera fase, que prácticamente ya ha culminado –escribe–, con la verificación del alto el fuego permanente. Una segunda fase, está el diálogo Gobierno español-ETA. Y, tras la desaparición de la violencia, habrá llegado el momento de iniciar de una forma seria la tercera fase del proceso: la formación de una mesa de partidos políticos.
Mercedes Herrero advierte de la nueva coalición de gobierno en Polonia, que incluye a los partidos de la derecha más radical, y señala que se trata de algo muy perjudicial para la jóven democracia. Conozca a continuación quiénes son los nacionalistas ultra católicos de la Liga de Familias Polacas (LPR) y los populistas antiliberales de Samoobrona (ambos anti-europeístas) y sepa por qué la nueva formación de gobierno en Varsovia ha sido recibida con reservas por Bruselas y ha provocado el rechazo de la oposición y de buena parte de la opinión pública.
Maximiliano Borches dice que la victoria electoral del presidente peruano Alan García (socialdemócrata), no puede traducirse en una victoria política, ya que esta última la cosechó el Partido Unión por el Perú (UPP), comandado por su rival –y ganador en la primera vuelta electoral– Ollanta Humala. En este sentido, Borches cree que García ganó por el temor a que ganara su rival y que esta situación no le será gratuita: se dará un escenario de fragilidad política, y con personalidades muy cuestionadas dentro del nuevo gobierno. Por esta razón, García debe lograr un consenso en Perú que posibilite una mayor profundización de la vida democrática.
Javier Ortiz escribe sobre la deslocalización empresarial y dice que las grandes compañías huyen de la Europa del llamado Estado del bienestar no porque las exigencias de cobertura social conviertan sus negocios en ruinosos, sino porque en el Tercer Mundo pueden pagar salarios de miseria, imponer jornadas laborales extenuantes y tratar a los trabajadores como objetos de usar y tirar. Ortiz cree que para evitarse este maltrato debería instaurarse una legislación internacional que imponga unos derechos sociales mínimos; para lograr ese objetivo sería necesario que mandara más la OIT y no el FMI.
Edgardo Mocca crítica el hecho de que los análisis en torno al ascenso de Evo Morales en Bolivia –y la aplicación de políticas nacionalizadoras– se hayan hecho descontextualizados, sin observar al pasado inmediato del país. En este sentido, el autor realiza una mirada diacrónica de Bolivia, y explica por qué hay que tener cuidado con la izquierda infantil y con la demonización y la extorsión que se insinúa desde ciertos círculos neoliberales. Sudamérica necesita una Bolivia democrática, pacífica y capaz de conservar su unidad como nación, y Mocca cree que el diálogo está abierto y parece ser hoy la única fórmula pragmática y efectiva para preservar la gobernabilidad democrática.
El bloqueo de la Unión Europea
El estado de bloqueo de la Unión Europea no se trata de una crisis de los valores que la inspiran, sino de un problema de liderazgo y de desorientación de los gobiernos ante unas sociedades que dudan de las intenciones de sus dirigentes y temen por el futuro de su modo de vida, sostiene el autor, quien opina que los propios líderes comunitarios no saben cómo afrontar el impacto de la globalización y la pérdida de peso internacional de Europa.
Rubén Campos analiza la situación política y social de Nepal tras las recientes manifestaciones en Katmandú, en las que miles de ciudadanos salieron a la calle para protestar –de forma noviolenta— reclamando la democratización del régimen. En este sentido, Campos cree que se ha abierto una nueva etapa política para Nepal y una oportunidad real para construir un Estado verdaderamente democrático, inclusivo y representativo. Sepa por qué es el turno ahora del pueblo que salió a la calle.