Marcelo Cantelmi
03/03/2011
Cae la noche en Benghazi y los libios se tiran a la calle a celebrar su revolución. Estallidos de cohetes, ruedas chirriando, tiros al aire y cánticos anti-Gadaffi componen la banda sonora de la revolución Libia. Las noticias de las vueltas de territorios a manos de los rebeldes levantan vítores por doquier, y la gente se arremolina en torno a las televisiones en las que se pueden ver las noticias de la cadena BBC, ya que la TV local está censurada por la dictadura. Pero lo más llamativo es el uniforme de la revolución. Alentados por el cambio de bando de algunos militares, los rebeldes libios se visten con uniformes militares, boinas estilo Che y trajes de camuflaje. Es manera de demostrar su apoyo a la revolución.